Tan solo Dios - si es que existe - sabe en que estaremos pensando y en que iremos en devenir. Porque si escuchamos el hit de Heraclito, nunca nos bañaremos en el mismo río (eso no es tan molesto, especialmente desde que hemos instalado una ducha en casa) pero tampoco nunca seremos los mismos, y eso es lo que da miedo.
Porque el solo hecho de pensar que desde hace tiempo estoy desechando un montón de Ruys o Ruyes (Plural de Ruy, que soy yo) para quedarme con un Ruy el cual desechare en un instante. El hecho es que estoy perdiendo muchisimas posibilidades de ser, da mucho miedo saber que al ser uno dejara de ser.
Todo esto, y finalizando la cuestión reflexiva de la fiestas, viene porque resulta que uno de mis vecinos de complejo (que de verdad vive a media cuadra ) puso lucesitas de Navidad en la ventana y por eso me obliga cerrar la ventana ( cabe decir que padezco de epilepsia) porque debido a un efecto extraño se refleja en la pared, provocando una pared tintineante)
Y en fin, el hecho que provoca todo. La epilepsia, la navidad, el calor, el insomnio, la posición de dormir y ¿quién sabe qué cosas más?. Es interesantisimo pensar como se chocan las cosas, y como se vinculan, hasta llegar a la conclusión de que no se puede pensar en nada. Es imposible pensar las cosas, y esto lleva a mi conclusión y frase final
" la vida es como jugar al billar sin fuerza de rozamiento"
Fin de las fiestas
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