miércoles, 20 de agosto de 2008

Miercoles 20 de Agosto 20 : 25

Iniciando estructura mentirosa para simular la inteligencia ... ... ...
*Doble sentido ... ... ... listo
*Juegito de palabras ... ... ... listo
*Retorica de preguntarse y responderse ... ... ... listo

Dios nos ha regalado una, ¿por qué decir una? nos ha regalado otra tragedia divina. Y esto me trae varias ideas, ninguna políticamente correcta, pero todavía no salve política (¿cuándo estarán las notas?) así que hay van.

Dice Carlitos Tanco que: "El principito" nos enseño dos cosas : "Que lo escencial es invisible a los ojos, y que los aviones se caen" . Que sabiduría esto último. El concepto de Calidad Total del Challenger, es falso. Siempre hay errores, siempre hay demasiadas variables que tener en cuenta. Además de preveer lo imprevisto. De esto se desprende lo consiguiente.

Todas las obras buenas son obras de Dios, viene un niño al mundo (suponemos que es un evento feliz) , Dios nos esta bendiciendo. Pero en las tragedias es mala suerte, las razones son científicas, si hay un terremoto es causa de las placas tectónicas. Apliquemos esto a la presente tragedia:
· Dios no esta · en lo malo · el accidente es culpa de problemas técnicos.
· Dios esta · en lo bueno · la gente que se salvo, se salvo por Dios.

Una de dos cosas
1) Dios quería estrellar el avión, porque era gente mala, e hizo que no entrara, cierta gente a dicho avión porque no era mala. Entonces no hay nada que llorar, mas que la rotura de un avión, lo cual no es gasto comparable con la muerte de tantos impíos.
2) Dios no salvo a los pasajeros del avión porque estaba distraido salvando a los que se quedaron afuera. En este caso, habría que castigar a los recién salvados debido a que su egoísmo fue lo que provocó tal daño. El castigo debería ser la muerte (se supenderia la pena si se podría revivir a los muertos del accidente).

Para cerrar yo diría que "los aviones se caen, salvo cuando se chocan antes, pero para el muerto es lo mismo"

¿Realmente desea abandonar la lectura?

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